¿Te paso alguna vez que tu perrito o gatito, no quiere comer ya sea el balanceado o lo que le serviste? O, le das balanceado y no quiere, pero pollito si, o si come en alternancia quiere pollo y no carne de vaca, o el pescado no lo quiere comer. ¿Esto te resulta familiar? Bueno, la elección de un alimento por sobre otro es un ejemplo de APETITO CAPRICHOSO.
Hay muchas causas de apetito caprichoso, no sólo la palatabilidad (sabor, olor, textura). Claro, si comen alimento balanceado y de repente le ponemos pollo y si, la mayoría elije el pollo, o carne porque son perros y son carnívoros. Pero debemos saber discernir entre apetito caprichoso y falta de apetito. Si nuestro perro no quiere comer nada (ni balanceado ni natural) o disminuye su apetito es motivo de llevarlo a su veterinario para que haga una consulta y lo revise y de ser necesario le haga los análisis que considere.
Pero si nuestro perro o gato es “mañoso”, podemos optar por:
- Establecer horarios para las comidas y en caso de rechazo retiramos hasta el próximo horario.
- Potenciar y enriquecer el balanceado con algo saludable y que les guste como los liofilizados de carne NatuPlus, huevo pasado por agua, suplemento proteico vitamínico Biprolife, verduras, arándanos, trocitos de carne, frutas.
- Hidratar con caldo natural de carne y/o verduras, un poquito de aceite de oliva, yogurt natural, caldo de huesos o alguna infusión como té de manzanilla.
- Cambiar a dieta mixta o alternancia con asesoramiento de un profesional nutricionista.