SEÑALES DE QUE DEBES CAMBIAR EL ALIMENTO

Al igual que nosotros, los perros y los gatos necesitan distintos alimentos según la etapa de su vida. Los cachorros, por ejemplo, necesitan más proteínas (siempre de calidad) y calorías porque están creciendo y, al contrario, cuando alcanzan una edad avanzada (alrededor de los 7 años, tanto para perros como para gatos), les conviene una dieta diferente con menos calorías y más fibra, pero también con proteínas de calidad. Pero la edad no es el único factor que condiciona la dieta de tu compañero. Las alergias, el peso, los problemas gastrointestinales o un pelaje opaco o parcheado son factores que deberían hacerte pensar en un cambio.

Estos son los principales casos en los que deberías modificar la dieta:

NECESITA ENGORDAR O ADELGAZAR: los perros y gatos sufren obesidad y excesiva delgadez debido a la mala calidad de los alimentos convencionales ya que contienen proteínas de baja calidad (harina de subproducto), son ultraprocesados y contienen gran cantidad de hidratos de carbono (cereales de relleno que contienen gluten) por su bajo costo como materia prima. No siempre está claro, pero la cintura, en el caso de los gatos, es un buen indicador. La mayoría de la gente no sabe cuál es el aspecto de un gato sano, pero los gatos también deben tener cintura. Deberías notar las costillas al palpar el pelaje y, al mirarlo desde arriba, debería tener forma de reloj de arena. Para tu gatito, te aconsejamos cambiar a un alimento completamente diferente, libre de gluten y elaborado con carne fresca, que potencia la sensación de saciedad, y con una buena proporción de proteína de calidad y grasa. Además hay complementos liofilizados de carne con un 70% de proteína de alto valor nutricional. No obstante, la comida no es el único factor que influye en el peso; también el ejercicio es fundamental. En el caso de los gatos, 10 minutos de juegos en casa es suficiente. En el caso de los perros, no basta con hacerles correr por el pasillo. Tendrás que moverte vos también en la calle para que tu perro haga ejercicio.Por el contrario, es posible que tu peludo necesite engordar si podés verle las costillas, las vértebras y los huesos pélvicos desde cierta distancia. Probablemente signifique que debés aumentarle la ración diaria y darle un alimento realmente nutritivo y de calidad (libre de desechos, cereales y aditivos artificiales).

SÍNTOMAS DE ALERGIA: si su pelaje parece deslucido y parcheado, es hora de darle una dieta más rica en ácidos grasos omega-3 y omega-6 para que su pelaje recupere vitalidad. Este problema no se debe necesariamente a una alergia, sino también a una dieta pobre en determinados nutrientes. Si tu compañero de cuatro patas se rasca mucho, es muy probable que sea alergia alimentaria. Como los alimentos convencionales contienen proteínas de diferentes orígenes animales y de bajo valor biológico (según los costos al momento de producción), muchos cereales de relleno y aditivos artificiales, es muy difícil determinar el origen de la alergia. Si bien existen alimentos con hipoalergenos aditivados, estos no erradican el problema, sólo lo tapan un tiempo. Es por eso que lo recomendable es que cambies a un alimento NATURALMENTE HIPOALERGENICO. También tendrás que dejar de darle comida natural de la casa para reducir el número de variables de la ecuación e identificar más fácilmente el causante.Cuando los perros tienen alergias, suele deberse a la fuente de proteínas. El 90% de las veces, la alergia es al pollo, a la ternera o al pescado. También puede ocurrir que tu perro manifieste alergia a la proteína de harina de subproducto de pollo o digesto de pollo del alimento y no al pollo fresco y natural. En estos casos, sólo basta cambiar la fuente de proteínas para solucionar la alergia. Pero siempre advertimos que el cambio debe ser progresivo.

PROBLEMAS GASTROINTESTINALES: suele ser fácil descubrir que tu mascota tiene problemas gastrointestinales: el olor y la consistencia de sus deposiciones de manera constante es la prueba más evidente. Los problemas gastrointestinales pueden ser el resultado de una intolerancia alimentaria ya que los alimentos convencionales son ULTRAPROCESADOS, contienen desechos cárnicos (harina de sub producto), gran cantidad de cereales de relleno (gluten), sal y aditivos artificiales como colorantes, saborizantes y conservantes. Cambiar a otra marca convencional sería más o menos lo mismo. La idea es tu cambio de enfoque, averiguá, investigá y no creas todo lo que te dicen. Hoy en día existe una fuerte tendencia a la nutrición saludable y consiente. Por suerte ya hay varias opciones de alimentos, que aunque no sean marcas conocidas, son mucho más saludables y nutritivos.

OLOR DESAGRADABLE: si sentís olores desagradables en tu peludo amigo, las heces y tu hogar, contrario a la creencia general, los perros no deben tener mal olor. Eso no es normal. Si tiene mal olor, además de higiene insuficiente y acumulación de sarro, puede ser que el alimento no sea el correcto. La alimentación influye de forma directa en el olor de los animales, sobre todo los perros.

¿CUÁL ES LA MEJOR MANERA DE CAMBIAR EL ALIMENTO?

Si decidís cambiarle el alimento, conviene que la transición sea gradual. Se aconseja empezar mezclando el anterior con el nuevo para evitar problemas. Tenés que dejar que el organismo de tu mascota se reajuste (cambio de flora intestinal). Si vas muy deprisa, podría tener flatulencias, vómitos o deposiciones irregulares. Si sucede, no quiere decir que tu mascota sea intolerante al nuevo alimento o que le esté haciendo daño. Sólo necesita tiempo para adaptarse. Si se niega a comer, te sugerimos que sigas mezclando durante más tiempo. Esto le ayudará en su adaptación al nuevo sabor. Recordá que son de hábitos y rutinas.Lo mismo ocurre si te decidís por la alternancia con alimentos naturales, siempre debe ser progresivo y en este caso, jamás mezcles con balanceado.

Por último, en caso de que a tu compañero le estés dando un alimento convencional de marca conocida y no manifieste ninguno de los síntomas mencionados, no quiere decir que esté bien nutrido y saludable. Puede que esté gestando una intolerancia o enfermedad a mediano o largo plazo. Todo depende en gran medida de los ingredientes y procesos de producción del alimento que le des. Para conocerlos, sólo basta con leer la lista de ingredientes. ¡Su salud, depende principalmente de vos!