EL PORCENTAJE DE PROTEINA BRUTA

¡Mucha gente se conforma cuando ve en el frente la bolsa de un alimento balanceado y le destacan como único argumento el porcentaje de proteína! ¡28%, que buen alimento! ¿Y si esa proteína fuera de origen de subproducto animal y carbohidratos de relleno, creerías que da lo mismo? ¿Por ejemplo, sabías que esa proteína puede ser el cuero de botas viejas? ¿Y sabías que se puede aumentar el nivel de grasa usando aceite de motor? Obviamente no es lo que ocurre pero tampoco está muy lejos!

El porcentaje de proteína bruta que aparece en los componentes analíticos del etiquetado es un valor, solo aproximado, de la cantidad de proteína que tiene un alimento. Ese valor se obtiene en laboratorio mediante fórmulas matemáticas, lo que impide inevitablemente obtener un porcentaje exacto.

Es muy importante aclarar que la proteína bruta, en sí misma, no ofrece información útil sobre la calidad y la eficacia nutricional de los ingredientes de origen proteico empleados en la receta. Por lo que preguntarnos: ¿cuánta proteína tiene que tener la comida de mi perro o de mi gato?; o ¿cuál es la composición ideal de proteínas para mi mascota?, no bastaría para ofrecer la mejor alimentación.

Existen otros conceptos que tienen más importancia que el porcentaje, en lo que a calidad y aprovechamiento de la proteína (y resto de nutrientes) se refiere. En Natural Pet seleccionamos sólo alimentos que tienen muy presentes la digestibilidad, el valor biológico y la biodisponibilidad de sus ingredientes; para así poder ofrecer alimentación completa, equilibrada y que brindan salud y calidad de vida. De eso se trata en definitiva.

Adquirir un alimento con un alto porcentaje de proteína bruta, no es sinónimo de calidad superior. De hecho, pueden darse casos en los que un alimento con un alto porcentaje de proteína bruta (reflejado en los componentes analíticos del etiquetado) no nutra tanto como un producto con valores menores (ya que entran en juego los otros factores decisivos para tu perro y gato), por lo que no es cuánta proteína lo que debemos de tener en mente sino qué proteína, qué aminoácidos y su origen.

Dada su importancia en la alimentación de nuestros compañeros, siempre deberían informarte acerca de estos factores clave:

  • Valor biológico
  • Digestibilidad
  • Biodisponibilidad

Por último, recordá que los porcentajes reflejados en la composición de ingredientes proteícos en el etiquetado del alimento no equivalen a la proteína bruta de la receta. Son conceptos diferentes que, en ocasiones, pueden llevar a confusión.

Exigí, indagá, investigá! Su felicidad depende de vos!⁣